Nueva York, Pennsylvania Station (miércoles 15 de octubre de 2025)
Título original
The Optimist's Daughter
Editorial
Random House
País
Estados Unidos
Fecha de publicación
1972
Premios
Premio Pulitzer de Ficción
222 páginas
sinopsis :
"La hija del optimista" nos presenta a Laurel Hand, una mujer que regresa a su hogar en Mississippi cuando su padre, el Juez McKelva, necesita una cirugía. Imagínate volver al lugar donde creciste, lleno de recuerdos y emociones encontradas. Para Laurel, este viaje es un reencuentro con su pasado y una confrontación con el presente.
Lo que hace aún más complicado este regreso es la nueva esposa de su padre, Wanda Fay, una joven que parece no encajar en la vida que Laurel conocía. La relación entre Laurel y Wanda Fay es tensa, llena de silencios y juicios tácitos.
Cuando el Juez McKelva fallece, Laurel se enfrenta no solo al dolor de la pérdida, sino también a la tarea de organizar el funeral y lidiar con los asuntos familiares. Es en estos momentos de duelo y reflexión donde Laurel comienza a entender mejor a su padre, a sí misma y a las complejidades de las relaciones familiares.
Esta historia es un viaje emocional a través de la memoria, el amor y la pérdida. Welty nos invita a reflexionar sobre cómo nuestras raíces y las personas que amamos nos moldean, incluso después de que se hayan ido. Es una novela que te tocará el corazón y te hará pensar en tu propia historia familiar.
¡Chicas! Les tengo que hablar de una novela que me ha dejado pensando, ¡y mucho! Se trata de "La hija del optimista" de Eudora Welty. La escogí para el reto de "La vuelta al mundo en doce libros" en la parada de Nueva York, no solo porque ganó un Premio Pulitzer, sino por esa promesa de un viaje emocional que, ¡uf!, lo cumple con creces.
La historia sigue a Laurel Hand, que viaja de Chicago a Nueva Orleans para acompañar a su padre, el juez McKelva, en una operación de retina. Lo que empieza como un viaje de apoyo se convierte en una estancia mucho más larga y complicada, porque el juez empeora y Laurel se queda para cuidarlo.
Pero la cosa se pone interesante cuando entra en escena Fay, la joven esposa texana del juez. Fay es el motivo por el que Laurel se había alejado, y al principio, es un personaje que te choca. Es mucho más joven que el juez y, a medida que su estado de salud empeora, Fay empieza a mostrar su verdadera cara. Tiene un ataque de nervios en el que confiesa haberse casado por dinero y haber sido infiel, y esta confesión acelera el final del juez. ¡Qué fuerte!
Después del funeral, Laurel y Fay viajan juntas a Mount Salus, Misisipi, el pueblo natal de Laurel. Allí, Laurel se reencuentra con su pasado, con gente que la quiere y la trata con cariño, mientras que Fay es vista con malos ojos. El drama se intensifica cuando, en el funeral, aparecen la madre y los hermanos de Fay, demostrando que ella mintió al decir que no tenía más familia. Laurel, en vez de sentir rabia, solo siente lástima por ella. Al final, Fay se va y Laurel se queda sola.
Esa soledad es la clave de la novela. Es un momento de introspección para Laurel, donde tiene tiempo para recordar su vida, pasar tiempo con sus seres queridos y reencontrarse consigo misma. Es un viaje de redescubrimiento personal, no solo geográfico. Al regresar a Chicago, tiene una visión completamente nueva de la vida y de sí misma.
"La hija del optimista" no es solo una novela sobre una pérdida, es sobre cómo nos enfrentamos a ella, cómo nos reencontramos con el pasado y cómo, a través del dolor, podemos redescubrirnos. Me encantó porque es una historia muy humana, con personajes tan complejos que se sienten reales. Es una de esas lecturas que te dejan con una sensación agridulce, pero con un mensaje poderoso. ¡Una parada obligatoria en mi viaje literario! Bicos.
Eudora Alice Welty (Jackson, Misisipi, 13 de abril de 1909 - ibíd., 23 de julio de 2001), conocida como Eudora Welty, fue una escritora estadounidense que escribió novelas y cuentos sobre el Sur de Estados Unidos. Welty ganó el Premio Pulitzer en 1973 por su novela La hija del optimista (The Optimist's Daughter). Asimismo, fue galardonada con la Medalla Presidencial de la Libertad en 1980. Su hogar en Jackson (Misisipi) fue designado como un Hito Histórico Nacional y está abierto al público como un museo.
Asimismo, en 1992, recibió el Rea Award for the Short Story por sus contribuciones a los cuentos estadounidenses.
Welty era miembro de la Fellowship of Southern Writers, fundada en 1987. También enseñó composición creativa en diversos talleres y universidades.
Aunque Eudora Welty no se identificó como feminista, su obra ofrece una valiosa contribución al discurso feminista al retratar la complejidad de la experiencia femenina y desafiar las normas sociales que limitan a las mujeres.
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